Diagnóstico capilar: no empieces ningún tratamiento contra la alopecia sin pedirlo antes
¿Tan importante es el diagnóstico capilar? Puede sonar muy drástico pero, si lo piensas, tiene todo el sentido del mundo. ¿Te operarías de un riñón sin antes hacerte las pruebas pertinentes para saber si es totalmente necesario? Pues (aunque la gravedad no sea la misma, como es lógico), ocurre igual con la alopecia y los problemas capilares. No siempre es necesario (o viable) un injerto capilar, y hay que encontrar el tratamiento o la solución más adecuada que permita recuperar el cabello al paciente. Y para dar con ell@s, es imprescindible contar con un buen diagnóstico, como Susana Pozo, responsable de Atención al Paciente de Capilárea, nos cuenta en esta entrevista en Radio Cope .
Para much@s, la falta de pelo es sólo una cuestión estética. Pero lo cierto es que, detrás de una alopecia o una caída de cabello más abundante y frecuente, siempre hay un motivo. Este puede ser genético en la mayoría de los casos. Pero también puede estar provocado por alguna enfermedad o patología concreta.
El estrés, los problemas hormonales, los efectos de ciertos fármacos, ciertos desequilibrios alimenticios… son algunos de los detonantes de una alopecia. Y es esto lo primero que hay que averiguar: la causa del problema. Porque, por mucho tratamiento que hagamos, si no “arreglamos” el problema de base, pocos resultados conseguiremos (o al menos, no los que esperamos).
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El diagnóstico capilar es más sencillo en hombres que en mujeres
Y la razón es muy simple: en más de un 80% se trata de un problema de Alopecia Androgenética masculina, lo que siempre se ha conocido como calvicie común. Es decir, existe un patrón genético. Pero aunque parezca desde un primer momento que estamos ante una Alopecia Androgenética, siempre es necesario realizar al paciente un análisis completo y exhaustivo. Y su objetivo es ayudarnos a saberlo con seguridad. De ahí la importancia del diagnóstico capilar.
En las mujeres, sin embargo, la cosa se complica… La caída del cabello puede que no sea causa solo de una patología. Puede que coincidan diferentes al mismo tiempo. En el 40% de los casos de alopecia femenina, existe lo que se conoce como hiperandrogenismo. Es decir, altos niveles de hormonas masculinas (andrógenos). Y esto además se puede unir a dietas poco equilibradas, problemas inmunológicos, períodos de estrés, maternidad, menopausia…
Por eso es tan importante contrarrestar de forma simultánea todos estos factores, para frenar el proceso. No basta con solucionar una causa, hay que frenarlas todas. Y el primer paso desde luego es un minucioso diagnóstico que nos de la clave de lo que está sucediendo. Un diagnóstico capilar correcto ante un problema de alopecia o de caída del cabello supone más del 70% del éxito del tratamiento o solución capilar que se aplique después.
Pruebas necesarias para llegar al diagnóstico capilar
Es necesario realizar al paciente un estudio completo, que incluya exploración del cabello en consulta. También hay que solicitar un estudio hormonal, un estudio en sangre y recuento celular, lípidos, glucemia, transaminasas, estudio de función tiroidea, ferritina…
En definitiva, se trata de tener toda la información posible. De reunir todas las pistas que nos ayuden a saber si realmente estamos ante un problema de alopecia o no. Porque puede que solo sea algo transitorio que no ha afectado a la raíz del pelo, y por tanto reversible.
Solo cuando ya sabemos cuál es la causa, podemos plantear la estrategia y el tratamiento (o tratamientos capilares combinados) para luchar contra el tipo de alopecia o problema que está provocando la caída del pelo.
Muchos pacientes acuden a consulta solicitando un tratamiento concreto o un Injerto de pelo directamente. Pero esta puede no ser la solución real a su problema. La garantía de éxito de un tratamiento es infinitamente mayor si contamos con el diagnóstico capilar adecuado. Si no, estaremos “matando moscas a cañonazos”.
Lo que sí es importantísimo es que el centro, clínica capilar o tricólogo o especialista que trate tu problema de caída sea totalmente honesto contigo, y te informe en todo momento de hasta dónde puedes llegar con los tratamientos. Te tienen que ayudar a plantear tus objetivos reales, lo que puedes y no puedes hacer, y no venderte sus soluciones sin más.
Y, como siempre insistimos, ante la menor sospecha, lo que siempre vamos a recomendarte es acudir a un especialista para que evalúe la situación. Esperar a ver qué pasa no suele ser la mejor decisión cuando hablamos de caída porque, por lo general, tiempo siempre corre en nuestra contra…
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